Ytororó fue la batalla a la que se denominó “La Termópilas” Paraguaya y que es recordada en dos calles de Asunción
La batalla de Ytororó fue una de las más encarnizadas de la Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay y justamente dos calles de Asunción homenajean su recuerdo.
Una de estas, R. I. 2 Ytororó, también recuerda al regimiento de infantería de destacada actuación en la Guerra del Chaco.
Está al Oeste de la avenida R. I. 18 Pitiantuta, que comienza su recorrido en la calle denominada Rafael Barret, al Sur, y se desplaza al Norte hasta la avenida Mariscal Francisco Solano López, en los barrios Los Laureles y Mariscal Estigarribia.
La otra calle que lleva el nombre Ytororó se inicia en un terreno particular, al Oeste del barrio Itay, más conocido como Grupo Habitacional Aeropuerto y se extiende hacia el curso del arroyo Itay, hasta la calle 14 de Julio. Es paralela al Norte a la calle Itaipu y al Sur a terrenos particulares.
En la batalla de Ytororó, las fuerzas paraguayas fueron de 3.500 hombres, reforzados casi al final por 1.500 más.
Los brasileros eran 18.000 hombres al mando de Luis Alves de Lima e Silva, marqués de Caxias.
El Mariscal Francisco Solano López ya se encontraba en Itá Ybaté, Lomas Valentinas, cuando el 5 de diciembre de 1868 llegó la noticia del desembarco enemigo en San Antonio.
Para cortarles el avance hacia Villeta, el Presidente Solano López envió al General Bernardino Caballero a interceptarlos en el puente, sobre el arroyo Tororó (Ytororó).
El arroyo queda a unos 30 kilómetros al sur de San Antonio. Nace en la planicie de Ybytypanema y desemboca en el río Paraguay.
Ytororó en idioma guaraní es: agua que hace ruido.
El puente era el único lugar por donde los brasileros podrían cruzar, debido a lo accidentado del terreno. Se llegaba al puente por un estrecho camino.
Tenía 20 metros de largo por 5 metros de ancho, sobre el arroyo entonces caudaloso.
Después de marchar toda la noche, el General Caballero, el 6 de diciembre de 1868, estaba presto para disputar la batalla.
Los brasileros hicieron cuatro embestidas y llegaron a ocupar el puente, siendo obligados las cuatro veces a retroceder, incluso hasta por encima de sus propios hombres arrasados en el desalojo.
En la tercera embestida, el marqués de Caxias, alterado por no poder tomar el puente, resolvió ir al frente al grito de: “Voy a enseñarles como muere un general, síganme los que sean brasileros”.
En este avance, su caballo fue muerto y tuvo que retroceder por encima de los cadáveres de sus propios soldados.
Después de la cuarta embestida, donde nuevamente los hombres de Caxias debieron retroceder, el general Caballero se retiró hacia Villeta.
Fue una decisión inteligente, teniendo en cuenta que se acercaban 8.000 brasileros a las órdenes del general Manuel Luis Osorio.
Caxias no persiguió al General Caballero, quien quedó entre Ypané y Potrero Valdovinos.
Todo indicaba que la batalla final llegaría, lo que no ocurrió.
Los brasileros se preparaban para atacar a López en Itá Ybaté, con 21.000 hombres, 3.000 caballos y 100 cañones.
La batalla de Ytororó es denominada la Termópilas del Paraguay. En Grecia hubo una batalla memorable en el estrecho desfiladero de Termópilas en agosto de 480 AC.
La historia cuenta que la guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay no terminó, a pesar de la superioridad numérica de los brasileros, porque los jefes no querían dejar de recibir las coimas del negocio de los víveres y los insumos, que eran un gran ingreso extra que dejó ricos a varios de los enemigos del Paraguay.