La Matanza de Buenos Aires obligó a Pedro de Mendoza a buscar mejores tierras al norte, fundándose Asunción
Como parte de la tercera entrega de la serie denominada Asunción, 500 Años, elaborada por la señora Evanhy de Gallegos, se destaca a don Pedro de Mendoza, el primer Adelantado del Río de la Plata.
Su decisión de enviar a los mejores hombres a buscar tierras menos inhóspitas al norte, culminó con la fundación del fuerte Nuestra Señora Santa María de Asunción.
El destino histórico lo vinculó a la elección del mejor lugar para la fundación del fuerte, desde el cual podría seguir desarrollando el objetivo de conquista.
Mendoza convenció al rey de España, Carlos V, de hacerse a la mar y explotar las riquezas que se vislumbraban.
Nombrado Primer Adelantado, organizó la armada naval en la que se alistaron los hombres que tuvieron relación directa con la historia de Asunción: el capitán Juan de Ayolas, de origen vizcaíno, y los capitanes Juan de Salazar de Espinoza, de Villa del Pomar, y Domingo Martínez de Irala, nacido en Bergara, quienes partieron de Sevilla el 21 de mayo de 1535.
Eran catorce embarcaciones con setenta y dos caballos y yeguas y dos mil quinientos españoles y ciento cincuenta alemanes, sajones y flamencos.
En las cortes de España y Portugal solo se hablaba de las enormes riquezas que podrían descubrir.
Ante semejante expectativa, el contrato se hizo por medio de una negociación pública – privada, siendo don Pedro de Mendoza financiador de su propia expedición.
Como contrapartida recibiría los títulos sobre esas tierras. El riesgo de la inversión del viaje valía menos que el cargo de gobernador, capitán general, alguacil y Justicia Mayor, además de alcalde de la primera fortaleza y con derecho de nombrar sucesor por dos generaciones a sus herederos.
Serían dueños de un inmenso territorio, que incluiría parte de la actual Bolivia, Paraguay, Brasil, Perú y Argentina.
Sin duda aceptó la propuesta del emperador Carlos V, de quien era amigo personal. Un año y medio duraron los preparativos. El hombre de confianza que le organizó la expedición fue Juan de Osorio, quien durante el viaje fue asesinado por orden del mismo Mendoza.
El otro hombre de confianza que le administraba la expedición fue Juan de Ayolas, a quien el destino reservó el honor de ser quien eligió el sitio para la Casa Fuerte de Asunción.
A los extensos territorios entregados para gobernar se denomina: Provincia Gigante de las Indias.
Pedro de Mendoza debía conquistar esas tierras, debía extraer las riquezas, fundar ciudades y defenderse de los portugueses, que no respetaban la Línea de Tordesillas.
El 3 de febrero de 1536 se fundó, en la boca del Riachuelo, en el Río de la Plata, el fuerte de Nuestra Señora del Buen Aire, la actual Buenos Aires. Navegó ciento cuarenta y seis días desde que partió de Sevilla.
A mediados de 1536, al no poder lograr la paz con los indios querandíes y por hambre, que terminó con los casi dos mil de los expedicionarios cercados por los indios, fue asesinado un grupo que salió a tratar de negociar con ellos.
El lugar donde fueron asesinados hasta hoy se sigue llamando “La Matanza”. El destino quiso que después de la matanza, en la que murió Diego de Mendoza, hermano de don Pedro de Mendoza, el Adelantado decidió enviar una expedición hacia el norte, por el río Paraná, alcanzar el río Paraguay y encontrar tierras menos inhóspitas para proseguir el proyecto. Así fue que se fundó en “Paraguay – y”, el fuerte de Asunción.
La Matanza de Buenos Aires, que quedó en la toponimia bonaerense, es conocida hoy día por ser elegida para residir por los migrantes paraguayos y sus descendientes, de todos los tiempos de nuestra historia.
